viernes, 3 de julio de 2015

¿QUIÉN SOY?
MI AUTOBIOGRAFÍA...


MIS PRIMEROS ESTUDIOS
Nací en un pequeño pueblo de Colombia, cercano a Bogotá, llamado Zipaquirá donde se encuentra ubicada una de las maravillas del mundo, la mina de Sal. Mi núcleo familiar está compuesto por tres hermanos y mis padres, quienes aún gracias a Dios siguen con nosotros. Actualmente todo el grupo está conformado por 17 personas.




En este municipio realicé mis cursos de primaria, en colegio privado  y bachillerato en colegio público, en los cuales cumplí a cabalidad con todas mis metas propuestas en el tiempo estipulado. Luego inicié mis estudios de pregrado en la Universidad Escuela de Ingenieros en Bogotá, ya que mi inclinación inicial estaba por el lado de la Ingeniería de Sistemas, sin embargo 2 años después y de luego de un cambio en mi vida bastante drástico, dejé la ingeniería para iniciar mis estudios en Licenciatura de Biología en la Universidad Pedagógica Nacional de la cual soy graduada.



Curiosamente mi práctica docente la inicié como docente de informática en una Escuela Departamental, donde con un único computador debía enseñar a más de 100 niños de diferentes cursos e igualmente trabajé con una comunidad de personas religiosas que pertenecían al Foyer de Charite dictando clases a unos niños de unas pequeñas veredas cercanas. Como complemento de esto y cumpliendo con uno de los requisitos del pregrado las prácticas eran en escuelas rurales del municipio de Choachí, Cundinamarca, dedicadas a enseñar en escuelas integradas donde podía tener niños desde tercer a quinto grado en un mismo salón de clases, situaciones que me enseñaron más a mí que lo que yo podía haberles enseñado a ellos desde la humildad, la sencillez, la caridad y la solidaridad en cada una de sus historias de vida, sus sueños y anhelos para llegar a ser mejores seres humanos.


ESTUDIANTE, ESPOSA, MADRE Y DOCENTE
A un año de mi grado inicié mi primera práctica docente formal, en el colegio de mi hijo, ahhhh porque claro para este momento ya era casada y tenía un hijo de 4 años, aquellas cosas que surgen un poco más aceleradas que otras que debían haber ocurrido primero, pero bueno, una experiencia de la cual también tuve que aprender mucho y salir adelante. En este primer “trabajo” el cual tengo como un bonito recuerdo, me convocó que mi amor por la docencia era grande, y que a pesar de las múltiples circunstancias poco favorables que me podían rodear en aquel entonces, lo que hacía era por amor y compromiso con mis niños que más por un pago, ya que como no era graduada no recibía ni el 20% de lo que podía ganar un docente en ese tiempo. Finalmente obtuve mi título y trabajé formalmente con ellos un año más, y realmente fue una gran escuela para mí y para mi fortalecimiento profesional. Mi hijo para esta época pasaría al grado de segundo de primaria, y el colegio aún no tenía acreditado bachillerato, así que nos pusimos en la tarea de buscar otra posibilidad en Bogotá lo que a su vez coincide con pasar también hojas de vida que nos brindara mayores oportunidades y así fue como llegué al colegio en el que me encuentro actualmente y del cual este año mi hijo se proclamará como bachiller, el Colegio San Viator, donde llevo ya 10 años laborando y entregando todo de mí para ser una mejor docente todos los días.

EL MONSTRUO…
Como parte de mi desarrollo profesional hice un Diplomado en Docencia Universitaria, culminé mis estudios en la Universidad de la Sabana en la Especialización de Gerencia Educativa y como una fase cruel de mi vida he hecho múltiples cursos para poder aprender inglés los cuales desafortunadamente NO han funcionado de ninguna manera, y aquí es en donde aparece el mayor temor de mi vida… el bilingüismo, el cual más que un reto se ha convertido en una pesadilla, ya que del aprendizaje de este idioma depende mi permanencia en el colegio donde me encuentro actualmente, y ahora aún más cuando éste también toma un carácter de colegio con educación internacional.
Así que lo que decidí fue buscar un valor agregado a mi perfil que no dependiera exclusivamente del manejo de otro idioma y me diera otras posibilidades para desempeñarme en el campo de la docencia desde otra perspectiva diferente a la tradicional.

Finalmente, mi vida actualmente trato de llevarla con tranquilidad porque ya estaba teniendo problemas de salud debido a la tensión y presión constante. Mi familia está compuesta por mi esposo, y mis dos hijos, un adolescente de 16 años y mi pequeña princesa de 5 años, quien aún me exige bastante tiempo y dedicación. Me considero una mujer feliz, disciplinada y en ocasiones un poco estricta llevada al extremo. Estoy en mi proceso de cambio de mentalidad, de evolucionar con el mundo y no en contra de él, de buscar mejores opciones y oportunidades de vida que se proyecten en el bienestar de mi familia.



No hay comentarios:

Publicar un comentario